jueves, 4 de diciembre de 2008

Feliz

Hay días felices porque sí. Un día, como cualquier otro día, te levantas y el día te sonríe sólo porque tiene ganas de sonreír. Hay sonrisas en cada esquina: saludos sonrientes al cruzar la calle, amables sonrisas que ceden asientos, risas de niños traviesos invitándote a jugar, miradas que ríen cómplices… Hay días felices, tan sólo, porque el día se despertó feliz.

2 comentarios:

Banyuken.es dijo...

Que tengas muchos días más así.

Selene Klhein dijo...

Gracias. Yo también espero que la vida te regale días luminosamente felices... aunque, ¡cuidado!, hay que tomarlos en pequeñas dosis, la felicidad extrema termina por reblandecer el cerebro. Por eso está bien que, de vez en cuando, haya un "díajoputa" (tb llamado "diacabrón"), para no peder la perspectiva